Quién me iba a decir a
mí que después de tantos años de haber entrado en estas aulas como alumna iba a
hacerlo, además, para leer uno de mis poemas... ¡Cosas veredes!
(El lugar es una de las aulas del Edificio Histórico de la Universidad de Oviedo y el motivo, la presentación del número 18 de la Revista Anáfora de Poesía)
Pd. Como puede comprobarse no estoy a la altura... al menos, de los micrófonos :)
Siempre se está a la altura, cuando tienes las ideas claras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Qué cierto, Alfred!
EliminarMuchas gracias por tu visita, buen finde!
Querida Sandra, enhorabuena por esa lectura en un sitio tan emblemático; creo que fue allí donde nos vimos en Oviedo para hablar de la poesía de Ángel González. Y tienes una presencia imponente que desconcierta al micrófono... Tu altura es mucha.
ResponderEliminarSí, en ese mismo aula fue donde diste la charla sobre Ángel González, José Luis y donde nos conocimos personalmente.
EliminarMuchísimas gracias por tu confianza, tus ánimos y esa buena opinión sobre mí.
Te dejo un fuerte abrazo!
Cosas veredes y verás, te auguro un futuro brillante en la poesía. El presente ya emite mucha luz. ¡Enhorabuena, amiga!
ResponderEliminarIsabel F. Bernaldo de Quirós