Somos pasajeros de la Vida,
y éramos – un poco todos-
pasajeros en aquel tren.
Y seremos habitantes- vitalicios-
de la Muerte.
Pero ciento noventa y dos
lo fueron antes,
-antes de tiempo-
a la fuerza, porque sí,
sin derecho.
El resto,
seguimos ruta
sin estación definida de llegada,
ni horario previsto.
y éramos – un poco todos-
pasajeros en aquel tren.
Y seremos habitantes- vitalicios-
de la Muerte.
Pero ciento noventa y dos
lo fueron antes,
-antes de tiempo-
a la fuerza, porque sí,
sin derecho.
El resto,
seguimos ruta
sin estación definida de llegada,
ni horario previsto.
Sólo somos pasajeros de la Vida.
Seguimos siéndolo.
Seguimos siéndolo.
©SandraSánchez
#11M #EnRecuerdoDeTodasLasVíctimasDelTerrorismo
Pulga, un impacto que siempre llevaremos en los más hondo del corazón. Recuerdo que aquel día, trabaja de comercial, estuve visitando mis clientes como un zombi. No entendíamos nada.
ResponderEliminarBonita dedicatoria, preciosos versos.
Abrazos.
Gracias Nicolás, nadie entendíamos nada y creo que (yo al menos) sigo sin entenderlo...Terrible!
EliminarAbrazos para ti también.
Sandra.
Como ya se dijo, aquel día todos íbamos en esos trenes. Un trozo de cada corazón se quedó con esos pasajeros, arrancados "antes de tiempo" y "sin derecho".
ResponderEliminarUn abrazo
Y que no se nos olvide y que no se repita Ángel!
EliminarGracias!
Otro abrazo para ti.
Sandra.
Muy bonito homenaje Sandra, todos nos sentimos identificados aquel día y el pesar todavía surge al recordarlo.
ResponderEliminarUn abrazo
Creo que ese pesar no se nos irá nunca Abril...
EliminarGracias!
Otro abrazo para ti.
Sandra.