Tras unos años de esfuerzo y excesivas horas de trabajo en el despacho, conseguimos por fin la ansiada cédula de habitabilidad. Incluso nos hizo ilusión colocar encima de la chimenea, casi a modo de altar, un ladrillo que habíamos guardado de recuerdo.
Con el tiempo, los pilares de aquella casa resultaron ser nada más que argamasa de pasión, no estaban cementados con verdadera entrega. Me di cuenta sólo cuando las grietas del mal humor, los celos, los malos tratos y el miedo, amenazaban ruina inminente.
Nuestro hogar acabó por convertirse en un infierno,
del que salí corriendo hace un momento con aquel ladrillo
en mis manos… teñido de rojo.
-Pulgacroft-
Participación en el Concurso de Microrrelatos sobre Abogados http://www.microrrelatosabogados.com/index.asp, que
convocan el Consejo General de la Abogacía Española y la Mutualidad General de
la Abogacía. Máximo 150 palabras, las 5 obligatorias del mesde Abril
eran:pasión, cédula, humor, inventario, ladrillo.
Leñe Pulga, qué buena metáfora constructiva, que se materializa realmente en ese ladrillo teñido.
ResponderEliminarAbrazos.
Hola, Pulga!! He llegado hasta aquí "de casualidad", siguiendo las miguitas digitales que he ido recogiendo de aquí y de allá. Me ha encantado tu espacio, y me han enganchado de tal manera tus microrelatos que ahora no soy capaz de irme; así que, con tu permiso, me voy a quedar un rato curioseando. Muchas gracias. Un abrazo!!
ResponderEliminarMiguel Jiménez, me alegro de que te haya gustado.
ResponderEliminarOtro abrazo para ti!
;)
Balagar, ¡qué alegría verte por aquí! No sabes cuánto me presta que te gusten jeje, por supuesto, estás en tu casa!
No sabía que tuvieras blog, yo también seguiré tus miguitas.
Gracias a ti y otro abrazo para ti.