Nos
lamentamos, hipócritas, de no haberlo visto venir. Como si eso fuera suficiente
excusa para eludir la responsabilidad que teníamos los dos mayores.
Como
si dejarlos correr por la orilla derecha de la carretera, no fuera una
auténtica imprudencia. Como si yo no fuera consciente de que al soltar la mano
de los gemelos, podría ocurrir un accidente.
Como
si aquel coche se los hubiera tragado así, sin más..., por capricho.
Me
lamenté antes de mudarme a la habitación vacía de mis hermanos.
Antes
de contemplar, con deleite, todo aquel espacio para mí solo.
-Pulgacroft-
Imagen: fotograma de la película "Los 400 golpes" de Truffaut.
(Microrrelato
presentado a la VII Edición de RelatosenCadena de La Ser. Máximo 100 palabras.La frase de comienzo
era “Nos
lamentamos, hipócritas, de no haberlo visto venir ")